Presidenta interina de Bolivia cancela viaje a región del Beni por posible atentado
- Luis Italo Pequeño Ramírez
- 18 nov 2019
- 2 Min. de lectura
El nuevo gobierno boliviano acusa del intento de magnicidio a agentes afines a los regímenes socialistas aliados del depuesto ex presidente Evo Morales
El viaje programado para este lunes por la presidenta interina de Bolivia, Jeanine Añez a su región nativa, el Beni, ubicada al noreste del país, fue suspendido al recibirse una alarma por un posible atentado en contra de la líder del Ejecutivo boliviano por parte de un grupo criminal, integrado presuntamente por agentes venezolanos, cubanos y colombianos afines a los intereses de gobiernos aliados al ex presidente Evo Morales.
Según la información recibida por el ministro del Interior, Arturo Morillo, la amenaza de atentado estaba fundamentada en datos creíbles, por lo que se consideró prudente cancelar el viaje de la presidenta, en un momento en que la agitación social y las protestas no cesan en distintas partes del país y mantienen al nuevo gobierno boliviano en vilo.
“Hemos identificado un grupo criminal que quiere atentar contra la presidenta, por eso hoy hemos tenido que parar su viaje a su tierra natal”, fue lo que indicó el funcionario boliviano. Esto se da luego de que, días antes a este suceso, el gobierno de Añez pidiera la salida de los integrantes del comité diplomático venezolano en Bolivia y la detención de varios ciudadanos cubanos acusados de avivar las protestas en contra de su gobierno.
Jeanine Añez, presidenta de Bolivia tras la salida del poder de Evo Morales, ha visto su gestión amenazada en los últimos días por los partidarios del ex presidente, quienes han salido a manifestarse pidiendo el regreso de este y la renuncia del gobierno provisional, al que han tachado de “golpista, racista y opresor”, en tanto que los opositores a Morales siguen también en pie de lucha.
Ante esta situación, el ministro de la Presidencia, Jerjes Justiniano, pidió a la presidenta Añez un llamado inmediato a las urnas a través de un decreto de urgencia por parte del Ejecutivo, a fin de poner un alto al caos que se ha apoderado de varias ciudades de Bolivia. No obstante, tanto Arturo Morillo, el ministro del Interior, como la presidenta interina han asegurado a la ciudadanía el desarrollo de elecciones libres en un plazo máximo de 90 días, descartándose así la primera opción.
Comments